MI EVANGELIO PREDILECTO 34
MI EVANGELIO PREDILECTO
PARTE 34SER DEL MUNDO,
NO SER DEL MUNDO
Una vez más, se trata de una ANALOGÍA, en donde "el mundo" es lo que nosotros, seres humanos hemos creado SIN DIOS.
Aceptemos que nuestra vida diaria y las actividades que realizamos en NUESTRO MUNDO, SON SIN TOMAR EN CUENTA A DIOS..... ése es EL MUNDO al qué se refiere Jesús Cristo.
Sí todas las personas que rodean nuestra vida cotidiana, ajenas a nuestra realidad personal y familiar, nos escuchan darles testimonio de la existencia de Dios y nuestra militancia a cualquier credo religioso, por supuesto que nos van aborrecer, repudiar e ignorar.
Esta situación real y verdadera, Jesús Cristo la comprobó y es la razón de estos versículos que leeremos.
*****************
EVANGELIO SEGÚN JUAN 15
Biblia Textual 3a Edición
(Todo lo que está en letra AZUL, son mensajes de Jesús Cristo)
16 No me elegisteis vosotros a mí, sino que Yo os elegí y os puse para que vayáis y llevéis fruto, y vuestro fruto permanezca, para que todo lo que pidáis al Padre en mi nombre, os lo dé.
17 Esto os mando: que os améis unos a otros.
18 Si el mundo os aborrece, sabed que a mí me ha aborrecido antes que a vosotros.
19 Si fuerais del mundo, el mundo amaría lo suyo; pero como no sois del mundo, sino que Yo os elegí de entre el mundo, por eso el mundo os aborrece.
********************
Al declarase CRISTIANO (así cómo declararse creyentes de cualquier otro credo religioso), "los ojos" de las demás personas, estarán pendientes de cualquier actividad nuestra que no sea acorde con la vida de Jesús Cristo, o de los preceptos religiosos de cualquier otro credo.
Porqué así somos los humanos, siempre JUZGANDO A LOS DEMÁS.
Declararse Creyente de Dios y militante de cualquier Credo Religioso, es una aberración para las demás personas que rodean nuestra vida y nuestro diario vivir.
ABERRACIÓN
Se considera que es un ERROR DE ENTENDIMIENTO en la relación con otras personas, también se califica de ABERRANTE cuando la persona se desvía o aparta de lo considerado cómo normal o usual de los demás.
Desde luego que asistiendo al servicio religioso de nuestra preferencia, los demás asistentes serán cordiales con nosotros (tú, yo y los demás), pero, si manifestamos alguna inconformidad con los preceptos qué rigen nuestra religiosidad, seguramente NOS ABORRECERAN.
ASÍ SOMOS Y ASÍ NOS COMPORTAMOS.
Continuará.........
José Jaime González Martínez
Comentarios
Publicar un comentario